En nuestra asamblea, hablamos de todo lo que nos interesa, y el otro día, hablando del cambio de estación y de todo lo que suponía eso, terminamos soñando despiertos, compartiendo un deseo de poder construir un muñeco de nieve cuando vuelva el invierno. Pero no somos demasiado pacientes, y lo que queremos, lo queremos ya; por eso, nos planteamos cómo construir un muñeco en primavera. Hubo una idea que nos encantó y fue la de Carmen; podríamos hacerlo de arena. Nos contó que su madre la había enseñado a hacerlo y nos explicó cómo; en ese momento, compartió su experiencia y su conocimiento con el resto, que enseguida, quisimos salir a la arena del patio para intentar hacer nuestro muñeco. Carmen nos dijo que el muñeco resultante era "con nuestra forma" y todos recordaron y volvieron a hablar de huellas.
Ya en el patio, empezamos a experimentar, y Alejandro nos descubrió que con el dedo o un palo, podíamos dibujar en la arena un muñeco. Comenzamos a imitarle, a escuchar su idea y repetirla, cada uno a su forma; también en ese momento, Alejandro estaba compartiendo con nosotros su conocimiento. Estuvimos explorando, probando, jugando.
En situaciones como esta, que surgen de manera espontánea, resulta importante escucharles, pues nos están dando pistas de lo que les interesa. Tenemos que dejarles hacer y retirarnos un poco para que sean ellos mismos los que vayan guiando sus acciones. Descubren cosas y después, es muy enriquecedor poder compartirlas con los demás y sentirse escuchado, sentirse útil para el grupo. Estamos conviviendo.
HUELLAS. on PhotoPeach
No hay comentarios:
Publicar un comentario